Por: Criminólogo Gerardo Karim Hernández
La dinámica delictiva en los jóvenes es un tema que preocupa cada vez más a la sociedad y a las familias no solo de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas, sino de todo el país. Saber identificar como padres o tutores las conductas delictivas a temprana edad y saber cómo actuar a tiempo puede marcar una diferencia importante en el desarrollo y futuro de nuestros jóvenes, niños y niñas. Esta semana abordaré cómo identificar algunos signos de conductas delictivas y qué hacer ante una situación de este tipo.
Identifica:
Como padres o tutores es de suma importancia estar atentos a ciertos comportamientos que son indicadores de futuros problemas aún más graves. Los *cambios en los comportamientos* son un síntoma muy común, como el aislamiento, la agresividad o una disminución en el rendimiento escolar.
Estos signos muchas veces vienen acompañados por problemas emocionales típicos de la edad. Otro rasgo a poner atención es las *nuevas relaciones de amistad*, es decir, el relacionarse con personas que son conocidas por sus malos comportamientos o que tienen antecedentes.
También hay que estar atentos a *problemas con la ley*, como involucrarse en actividades ilegales menores como el vandalismo o el robo, y por último, un factor desencadenante de conductas delictivas como lo es el *consumo de sustancias* como el alcohol o las drogas.
Si usted sospecha o descubre que su hijo o hija está involucrándose en alguno de estos puntos, es importante tener una *comunicación abierta* de manera calmada, para entender la raíz de la conducta.
Será primordial *establecer límites e involucrarse más en la vida de sus hijos*, aumentar la supervisión y la participación en la vida diaria, conocer a sus amistades y las actividades, así como crear reglas y consecuencias claras a las conductas negativas. Si usted identifica problemas emocionales y conductuales en sus hijos o hijas, *busque ayuda de un profesional*.
Según el *Sistema Nacional de Seguridad Pública*, en Jalisco ha habido un aumento del 15% en los casos reportados de delincuencia juvenil comparado con el mismo período en 2023; el robo, el vandalismo y la posesión de sustancias son los delitos más comunes cometidos por jóvenes de entre 14 y 17 años.
La desintegración familiar, la falta de oportunidades educativas y la influencia de pandillas locales son contribuyentes significativos a esta problemática cada vez más grande.
Estas cifras subrayan la importancia de la prevención y la intervención temprana. Las vidas cada vez más aceleradas y los costos de los productos básicos cada vez más altos hacen que los padres de familia estén más ausentes en el hogar por la necesidad de salir a trabajar. Es importante poner atención en nuestros jóvenes, crear mejores condiciones y mayores oportunidades para tener un entorno más seguro y positivo.
Nos leemos a la próxima.
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